domingo, 6 de diciembre de 2015

LA SECTA

“Te entiendo perfectamente”, traducción: que te jodan.
“Llevas toda la razón”, traducción: me la suda.
“Nos ponemos ahora mismo con ello”, traducción: me la pela.
“Lo solucionamos ahora mismo”, traducción: que te den morcillas.
“Te vamos a dar el mejor servicio, un compañero te atiende ahora mismo”, traducción: me la sopla.
Les presento el traductor de ESPAÑOL-MAC, MAC-ESPAÑOL.

En el último mes he estado más en la tienda de MAC de la puerta del Sol que en mi casa, (y sí, salgo mucho, pero no tanto). La razón… la puñetera mentira de la manzana Macintosh, esa sí es la manzana podrida y no la del cuento.
Entrar en esa tienda es entrar en la posguerra, cientos de personas esperando en colas como a la cartilla de racionamiento. Una primera cola de distribución para derivarte a una segunda de especialización de tu problema y luego a buscar sitio y a esperar a que digan tu nombre una pandilla de chavalotes informáticos vestidos con las mismas camisetas, los mismos ipads en la mano como armas dispuestas a disparar y las mismas caras de freaks.


Tú te compras un MAC porque mola, postureo, pero también porque alguien se inventó eso de “es que no entran virus” “nunca se estropean” y sobre todo… “el servicio es lo mejor”, ¿¿el servicio?? Será el que usas para cagarte en su estampa cada vez que haces cola en una tienda petada de peña.
Horas de espera deseando que digan tu nombre y uno de esos freaks te atienda con esa sonrisa impostada e importada de América. Cuando lo has conseguido, empieza la retahíla de frases marketinianas de empresa americana. El capitalismo hecho poesía. “Aquí estamos para ayudarle”, “su problema es mi problema”, “lo resolveremos con la máxima celeridad”, “por supuesto que está en garantía”, “tiene toda la razón caballero”, bla, bla… y así hasta hacer el soneto más hipócrita de la historia. Tú tienes ganas de asesinar al menda, pero él sigue sonriendo. Son como soldados en Vietnam, están entrenados para soportar gritos, insultos, torturas que harían estremecer al coronel Truman, sin perder la sonrisa.
Su estrategia es retorcida, primero te enganchan con el móvil y luego te dicen que eso se conecta a tu ipad, a tu ordeandor, a tu ipod y a tu icloud  y a tu itunes y… y así la manzana va colonizando cada rincón de tu casa, menos la nevera (que esa está llena de birra). Es como tener un hijo, ¿es un lío no??. Pues tener 4 es mucho peor coño!!.
Y es entonces cuando viene el rollo de la exclusividad. Tú pagas más caro porque es exclusivo, pero resulta que a tu lado sentada esperando a que digan su nombre como tú, hay una choni con el iphone rosa brillante tuneado con una pegata del Fabric… ¿exclusivo??, pero si hay agricultores afganos que tienen un iphone!!!. Lo único exclusivo son los cables, cargadores y demás cacharros carísimos porque sólo, única y exclusivamente valen para sus Mcmierdas.



Son los inventores de la obsolescencia programada y todos los que estamos en esa cola con nuestros Mctruños estropeados somos conscientes de ello. Pero entonces ¿cómo es posible que millones de mongoles hagan colas inmensas para pagar un cojón de pato por el nuevo modelo de iphone el día uno de que salga a la venta?. No pueden pagarse el alquiler del mes siguiente y se compran los zapatos en los chinos, pero en el bolsillo llevan 800 pavos en forma de manzana.
A veces tengo pesadillas, con un tipo que se ríe de mí con carcajadas estremecedoras a lo IT el payaso de Stephen King con su PC y su Android entre las manos, que ha comprado por 600 pavos menos y le funciona de lujo… y me despierto entre sudores, miro mi Macbookpro entre escalofríos y me vuelvo a la cama.

Tras tres hojas de reclamaciones y un pollo al estilo provinciano a tres freakes-encargados-supersonrientes de la tienda estoy escribiendo este post desde mi Mcbookpro. ¿Cuánto tiempo durará la paz la tranquilidad? ¿sin tener que ir a esa mierda de tienda??. Mi conclusión es que lo mejor de Mac es el BigMac señores.

domingo, 15 de noviembre de 2015

TÚ A HOUSTON YO A CADIZFORNIA

Hace unas semanas que volví de América, me encanta y me horroriza a partes iguales, “American horror story” o “Love story” ¿con cuál se quedan?. Y sobre todo... ¿Por qué nunca llegaremos a ser cómo ellos??. He aquí las diferencias entre una ciudad americana como Houston y una española, pongamos Albacete.

- En Houston no hay ni Dios por la calle. La universidad de la calle se creó aquí, de ella hemos aprendido todos, desde Belén Esteban hasta Botín. La gente disfruta de los parques al aire libre, hasta hace no mucho te llamaban al telefonillo de casa para bajar a jugar a la calle. Los españoles se sacan la birra a la calle, las terrazas son religión. Allí los únicos que caminan son los vagabundos y los turistas despistados. La gente va en coche de centro comercial en centro comercial y si quieres caminar... a la cinta del gimnasio amigo.

- Hablando de coches... son muy grandes. Bueno, allí todo es más grande. Los coches, los policías negros (siempre son enormes y negros) como una especie distinta, creada sólo para acojonar. En América un smart es el cochecito que regalan a su hijo de cinco años para que juegue en el jardín. Se mean en los Minis lo único Mini que tienen es la novia de Mickey (este chiste está forzao la verdad). Hay ruedas de coches americanos que son más altas que un tractor de la vendimia, vasos de Coca Cola como la Termomix y camiones que ocupan más que campos de golf en medio de La Mancha. 



- Por otro lado, en el país más desarrollado del mundo, donde han hecho de una manzana una religión. Donde MAC y Microsoft han nacido... no conocen que es una puta persiana en condiciones. Ese invento que hace posible que pases una resaca como DIOSMANDA sobando hasta las 3 de la tarde y que hace que no te descompongas como un vampiro con el sol entrando a las 6 de la mañana. Tampoco saben qué es una cadena del wáter normal. Esa que no se recrea, que succiona todo lo que haga falta a la primera. Ellos tienen la que hace «efecto heiser», eleva todo el tema para enseñarte lo más sucio del interior humano y luego por fin se lo traga. Por el contrario, su papel del wáter es cojonudo, sí, con doble, triple e incluso cuádruple capa. Calidad señores. A medida del culo de un poli negro.

- Les salva que no saben lo que es el gotelé. El tipo que lo creó, claramente era español y tenía miedo a volar en avión, nunca cruzó la frontera, porque somos el único puñetero país que convivimos con él. Hemos hecho marca registrada. 

- Fumar-beber tojunto, una combinación maravillosa en la vida, es posible todavía en las terrazas españolas. Allí, te ponen una bolsa de cartón cuando pides una lata de birra en una gasolinera, como si fueras un yonki. Y si quieres fumar tienes que hacerlo lejos, muy muy lejos, tan lejos... que a veces cambias de estado y ni te has dado cuenta. De Miliwoki a Cincinatti con un pitillo.

- En Houston todo engorda. La lechuga engorda, el pepino engorda, el brócoli engorda, todo lo verde engorda... y si lo verde engorda imaginaros el resto... Ellos son los reyes de la salsa y no los dominicanos, todo lleva salsa, barbacoa, mayonesa, sirope de arce, mantequilla de cacahuete... 

- Hace mucho frío, todo el rato, en todos los sitios interiores. Houston tiene una temperatura ambiente de 30 grados en octubre, en verano más de 40. Pues en el interior de cualquier sitio, bar, súper, museo, coche, piso, baño, el aire acondicionado sopla más que el cierzo zaragozano en diciembre.

- Son muy horteras, sí, y cuanto más ricos más horteras. La pasta es inversamente proporcional al estilo. Ellos no inventaron los calcetines con sandalias, ahí los alemanes se les adelantaron, pero el resto es culpa de ellos. Porque un gordo con una camisa hawainana, un sombrero de cowboy, careto operado a lo Mickey Rourke, y sandalias de cuero a lo discípulo de Cristo... hoy puede parecer hipster, pero ha sido un hortera detodalavidadeDios. Sí señores, lo he petao en Houston. Allí con una falda del Primark y una camisa de 5 pavos del HyM eres la puñetera Anna Wintour. Que por cierto es americana, pero recordad que Nueva York no es América, es un pequeño búnker perdido, donde todas las personas a las que se les incendian las pupilas viendo a un «red neck» de Utah, se han encerrado allí. 

- Su concepto del glamour es un croisssant y un capuccino, cortar unas verduras en una tabla de cocina mientras se toman un vino de mierda (porque sabemos que los vinos de Napa son de mierda) y decir que una vez estuvieron en París.

- Sonríen todo el rato, te desean «have a nice day» (el 90 por ciento de los españoles menos Leonor Watlin y Gunilla Von Bismark) no lo entenderán), pero traduzco: «pasa un buen día». Los camareros te atienden antes de que lo pidas, no han desarrollado esa habilidad típicamente española de mirarte fijamente cuando tienes la mano arriba y hacer que no te ven. Disfrutan con su curro, no tienen esa cara tan española de amargue vital por estar sirviendo cafés. Allí, un camarero del Starbucks parece un ejecutivo de una macroempresa que se toca el pie cada día y va a currar en calzoncillos con un sueldo de 20.000 dólares al mes. ¡¡¡Les encanta su trabajo!!! ¡¡¡sonríen!!!. Creo que la sobredosis de azúcar en los muffins tiene el mismo efecto en ellos que el LSD. 

- Les flipan los destructores de basura. siempre hay uno en cada cocina. Es su particular bola antiestrés. Eso y pegar tiros, nosotros los pegamos con la playstation, ellos, de verdad.

- Sus casas no tocan el suelo. Y debajo tienen siempre garajes con muchas herramientas. Porque construyen todo. Una mesilla «esttronferguanter» del IKEA que para un español medio es más difícil que montar el cubo de Rubik, para ellos es como un rompecabezas de dos piezas, tardan 5 minutos. Los reyes del «do it yourself» traduzco de nuevo. «hazlo tú mismo».

- Y esto me lleva a una gran diferencia, allí to Cristo habla un inglés impoluto. 


- Eso sí, en Houston no saben pronunciar la J ni la Ñ. Algo que parece vanal y supérfluo, no lo es, porque dicen HINAR. Y nunca podrán GIÑAR en condiciones, por mucho papel bueno que tengan.

domingo, 20 de septiembre de 2015

EL CIRCO DEL ARTE

Algunos van al circo… yo prefiero una exposición de arte, me pilla más a mano, la entrada es gratis y el espectáculo… muy parecido.

Están los domadores y los leones, están los de la taquilla y los equilibristas, los que tiran cuchillos y los que se ponen delante arriesgando su jeta. Comisarios y artistas, no doy pistas… ahora adivinen quién es el pringao y quién lo peta. 
Hay colorines, truños del tamaño de un elefante, y elefantes en forma de truño, maravillas mágicas que te dejan con la boca abierta, bocas hambrientas… Porque hoy día el catering se ha reducido más que un Pedro Ximénez, con suerte te bebes un Don Ximón y si te quedas con hambre, te cenas antes un Urroz, con leche o con pollo. Tú te agachas y yo te follo. De poner el culo, de eso aquí, muchos saben.

Comienza la función: (SONIDO DE TAMBORES… Trrrrrrrr) El primer espectáculo el de los artistas, unos leones, allí salen los pobres, a subirse en una banqueta como la cabra de la legión, a bailar al son del látigo del que paga, o del que no paga que es peor… acaba el número, el domador sonríe, el león ruge, pero muy bajito, y el público aplaude esperando el siguiente numerito.

Es cuando vienen las bailarinas, brillantes, ayudantes… esas que recorren muchos circuitos, aspirantes a artistas, groupies de ellos y no del arte. Las hay que quieren pasar a la historia inmortalizadas en una obra, que menean el culo por la pista, que se atusan, que aspiran a musas, sin pisar la misa y aquí hay que saber de qué va esta religión, hay que decir Amén, que no Amen, que una tilde o la M por delante te convierte en amante… y no del arte. 

Es la hora de los contorsionistas… esos artistas que se menean por la arena, culebrean. Los que ponen una mano en el hombro y a la vez hacen el pino y con la otra una paja, los que meten tripa y llevan faja. Los que comen la oreja a las galeristas viejas, los que viven del cotilleo, del qué dirán, los que quieren estar. Los que se venden y se doblan y se meten en una maleta, los de las tretas. Artristes prefiero llamarlos más que artistas, los contorsionistas.

 


 Y después de la tensión… llegan ¡¡¡los payasos!!! ¡¡¡las risas!!! que retumban en un eco continuo en la sala, donde nadie se entiende, sólo se escucha un murmullo constante, festivo, eterno. El festival del humor, de la felicidad extrema, del somos guays, del creamos, pero no nos creen, del quiero vivir de esto…, pero por el camino muchos mueren.

Aparecen los elefantes, grandes, vetustos, inmensos, viejos coleccionistas, esos que se pasean con sus barbas. A los que le sigue una corte de plebe hambrienta, los que juegan con el sustento, los que caminan lento. Observando obra por obra, cuando lo que les importa es lo que les sobra. La pasta, la inversión, nada del sentido de la obra, a la mierda los cuentos, busco cuentas, tú no me rentas.

Y ningún espectáculo es nada sin magia, la que tiene el arte y quien lo crea, la magia de la obra y de su artista, del trabajo, de la idea. Pero dejémonos de historias bonitas, eso en el cine no en el circo, aquí se busca la sangre, el truco final… (SONIDO DE TAMBORES) trrrrrrrrrrrrr… 

 
Y consiste en que el artista vende su obra a un señor con traje Armani y su esposa rubia, se llama Fany. El artista y el público se emocionan, las gradas gritan y bullen de ilusión, el galerista se frota las manos y entonces es cuando… TACHÁÁÁÁNNN… El dinero o no aparece o se queda en el camino, ¿en otras manos? ¡¡se esfuma!!. Público y artistas abren los ojos, fascinación en la pista, ¿dónde está el dinero? ¿qué ha hecho con él el mago?, ¿o el galerista? ha volado como la paloma… debe estar en el MOMA.


¿Han disfrutado del espectáculo??, ¿les ha gustado??. Un circo más donde los payasos ríen por fuera y cuando se quitan el maquillaje lloran frente al espejo. La próxima vez que vayan al circo, o a una expo, sean conscientes. No se escandalicen por un vaso medio lleno o medio vacío cuando lo que importa es lo que hay dentro, que el agua está envenenada.

 

domingo, 19 de julio de 2015

LO ESPECIAL

Hace no mucho leí esta frase “la vida es demasiado corta para enamorarse de lo común” no sé quién lo dijo, pero si lo averiguo me lo tatúo en los pechos. Hay que ser especial, lo especial mola. El menú especial tiene comida más rica, un traje especial (que no espacial) es más bonito y te puede hacer sentir en la luna, una ocasión especial mola más, una mirada especial es única, todo lo que acompaña especial, menos la educación, es mejor.



- Un peluquero hipster de barba espesa lleno de tatoos que te enseña las fotos de la mili orgulloso.
- Un taxista que no sabe a las 10 de la noche cómo va el Madrid-Barsa porque estaba escuchando radio clásica.
- Una moderna de Vans y pelo a lo afro que le pirra el Bakalao (y no al pil pil, sino de Pim pam).



- Un zapatero remendón de los que ponen tapas, que entre punta y tacón, cose látigos y esposas de cuero para sados.
- Un motero con chupa de cuerazo, que fuma Ducados y se dedica a vender casas de muñecas.
- El camarero de un bar de moda cool, experto en rock and roll que le pirra la salsa y la baila como un dominicano.
- Un chaval de las tres mil viviendas, rapero, con pantalón caído y gorra de medio lado que odia los porros y toca el violín.
- Un político con principios, que no se deja corromper por la pasta.
- Una abuela de 80 años que hace yoga y se pinta los labios cada día para salir a comprar el pan.



- Un cura que no da sermones, que cree que no hay que resignarse en la vida porque no es un valle de lágrimas.
- La hija de un magnate que decide trabajar en una ONG en África.
- Una monja que coquetea con la mirada en el metro, con un tipo de mediana edad.
- Un artista que no cree en el arte, cree en sí mísmo, que trabaja para él y no para el mercado.

Personas especiales y reales, que no son literatura de un post, todas ellas están o han pasado por mi vida en un momento dado, que se cagan en los tópicos y los transforman en algo especial. Freaks, especiales, que hacen la vida más especial. 
Porque soy rubia y no soy tonta, porque me río mucho de todo y no soy frívola, porque leo ensayos y escribo poesía y no soy intensa, porque tengo unas New Balance y llevo el labio rojo y no soy moderna, porque digo "te quiero" y no soy una ñoña, porque llevé perlas y no era pija. Porque mi vida es muy corta para enamorarme de lo común... brindo con una infusión de jengibre por LO ESPECIAL, porque con birra sería lo de siempre y porque son las 10 de la mañana y me llamo Rebeca no Massiel.

domingo, 28 de junio de 2015

LOS COOLTRES

Dos situaciones:

Un abuelo jubilado que va de feria en feria a la caza del boli, el llavero y el souvenir gratuito, las olivas y el cafelito por la cara. Definición Cutre.

Un moderno autónomo de profesión liberal que se recorre en una tarde dos inauguraciones y tres pop up a la caza de la cami molona, el pen y la birra by 
the face. Definición cool.

¿Me encuentran las siete diferencias??. Pues no hay ninguna señores, lo cool y lo cutre se dan la mano. Ha nacido una nueva especie LOS COOLTRES o lo que viene siendo el modernoajubilao.



- El abuelo está jubilado.
El moderno es autónomo y se dedica A/ al arte, B/ producción de conciertos, C/ colaborar con blogs, D/ camarero- actor, E/ hacer bolos pinchando de Dj.
A los dos les une lo mismo, un sueldo de mierda.

- Ambos gozan de tiempo libre y horarios flexibles por obligación (aunque los segundos no lo admitan), y lo emplean jugando, unos a la petanca y otros a la play. ¿Qué es más digno?.

- Unos se van a la última feria del tractor a IFEMA.
Los segundos cambian la feria por tres inauguraciones y dos pop up en Malasaña, que pal caso es lo mismo señores.




- Los abuelos salen de allí con una bolsa de plástico con tres bolis de propaganda, dos libretas, una camiseta de Cepsa, dos folletos,  y un llavero que pone “Saimaza tu café”. Y en el estómago tres croquetas, dos olivas y un cafelito free gracias a Saimaza.
Cambien la bolsa de plástico por una de tela con una calavera pintada, con un puntero para el móvil y pen drive, una camiseta del “Primavera”, un fancine, tres dim sum y dos nachos con guacamole y un jaigermaister en probeta.

- Ambos han dejado de afeitarse hace tiempo, aunque por razones distintas. Unos llevan barba, los otros también.

- Ambos van al parque, unos a llevar a los nietos y otros al perro. Y ambos recogen las babas y la mierda de ellos.

- Ambos disfrutan de la arquitectura urbana, unos ven obras y otros grafittis.



- Ambos veranean en Benidorm, sí señores, porque que allí se celebre el Low Cost Festival, no hace que Benidorm tenga más glamour.

- Los dos tienen pensión, unos la cobran y los otros duermen en ellas cada vez que viajan. 

-Los dos cultivan, tienen huerto y comen tomates de la tierra. Unos en San Martín de Valdeiglesias y otros en una terraza de dos metros cuadrados en el metro Iglesia.

Dos pelis distintas con la misma banda sonora, Freddy Mercury, pero cambien el I WANT TO BE FREE, por I WANT IT FREE.

domingo, 17 de mayo de 2015

VERGÜENCICA AJENA

Hay muchas cosas que avergüenzan en la vida, pero lo normal es no festejarlas. Lo más mongolo del mundo es festejar las vergüenzas. Superado ya lo del cabra del campanario, de denuncia más que de vergüenza… hablo de esas fiestas que dan vergüenza ajena. No voy a dar nombres de pueblos para no ofender al personal. Es curioso, que algo tan tonto, donde naces, y por ende, las fiestas de tu pueblo, algo fortuito y casual en la vida, sea una de las cosas que más orgullo nos hace sentir o más nos puede ofender, sinsentidos de la vida, como un taxista el PP o las gambas con cuchillo y tenedor. 

Antes, un aviso: Todas las fiestas que aparecen en este post no están inspiradas en la realidad, son literal y escrupulosamente reales, existen lojuroporlomássagrado. Mucha gente las ha vivido, yo las he sufrido (currando con un micro).

- La fiesta de la tortilla: Un clásico pueblerino. Encontrarte con una mesa con 4 tortillas tristes tortillas que no se comen ni tres tristes tigres del zoo (y todo el mundo sabe que están muertos de hambre), hechas de alcaparras, chorizo con lacasitos, patata, huevo y mortadela y que gane la más original… no tiene nombre, eso destruir no deconstruir. Una fiesta donde 30 jubilados (mi respeto y envidia para ellos) se traen un mendrugo de pan y se zampan las obras culinarias y el ganador se lleva un trofeo de bronce con una placa dorada donde pone “ A la mejor tortilla de Villarejo de Arriba 2015”. Que posteriormente pondrá encima de la tele del salón, una vergüenza lleva a otra. Una viñeta aderezada de una disco móvil en un descampao donde tres niños con una bici, el borracho del pueblo (que normalmente se llama Patricio o Anselmo) y dos parejas que llevan todo el año en bailes de salón, se mezclan culminando una estampa propia de los desastres de Goya, pero en tonos fosforitos.


La fiesta del pan y del queso. ¿Suena bien no?? vale, pero no cuando consiste en que desde un balcón cuatro mendas y un cura tiren mendrugos de pan y trozos de queso a la gente y una aglomeración de peña, muerta de hambre se pegue por un chusco, llegando a agredir, aplastar, arrollar y meter mano, sí señores, salir de allí sin que te hagan un bombo es misión imposible. Bueno, pues eso, que visto desde fuera, da más vergüenza que tu madre con tres copas cantando en una boda. Si tiras unos bocatas de jamón desde un helicóptero sobre Burkina Faso hay menos hostias, en serio. 

Y hablando de bodas. Las hay muy muy de vergüencica ajena. La celebración del amor, de la comida, del matrimonio (y no me refiero a anchoa y boquerón, ojalá) puede llegar a ser lo más vergonzoso del mundo. Por ejemplo, ¿por qué hacer una boda ibicenca si eres Albacete y no has pisado una playa en tu vida?. O una boda donde pincha tu primo que dice que es DJ y pone la última de Enrique Iglesias seguida de una maqueta de sus colegas “Los eructo radical”. Tampoco hay necesidad de hacer poemas para leer en la iglesia cuando piensas que Alberti, es Alberto en italiano. O poner tempura de verduras en cestita de hojaldre de trufa cuando el cocinero se llama Manolo y el restaurante está a las afueras de Villaverde de Abajo, si allí clavan el cordero, no arriesgues anda. O llevar zapatos forrados con la misma tela del vestido y de los tocados. De verdad, un tocado es lo que llevan en Ascott, las flores de los chinos son sólo para el día de todos los Santos y dan Asco.

Las fiestas donde eligen a damas y damos de fiestas. Esas son muy fuertes, porque por pura estadística si el pueblo es pequeño habrá poco donde elegir y lo de que el tuerto es el rey en el país de los ciegos a veces es literal. He visto a una bizca dama de fiestas. Mi respeto a los bizcos, pero si se trata de belleza… yo nunca participaría en un concurso de altas porque mido 1,63 o de vascas porque soy maña, en fin, hay que conocer las limitaciones propias. El panorama masculino es peor, habría que amordazar a las madres cegadas de amor por sus hijos que se empeñan en que sean damos y no, señora, lo siento, no vale pa eso. Igual le puede apuntar al concurso de la patata más gorda y lo peta.

Fiestas taurinas. Reconozco que éstas las he practicado, pero hay que tener medida señores. Son fiestas donde se bebe tres días seguidos, 24 horas al día y pierdes los papeles, la virginidad, la dignidad y hasta las bragas y luego una tiene que volver a la oficina de hacienda del Ayuntamiento donde curra el resto del año, a hacer la declaración de la renta de Pepe, después de haberle hecho una mamada en la puerta de ese mismo Ayuntamiento a las 4 de la madrugada.



Fiestas de motivos ridículos. A ver, no hay que ponerse intenso con los nombres de las fiestas, la fiesta del Bosón de Higgs no mola, pero tampoco más simple que un ajo. Me refiero a la fiesta de la rama o del palo, sí existen señores y ¿en qué consisten??. Pues en llevar una rama en la mano y un palo, así de sencillo, ¿de verdad hay que hacer una fiesta de eso??. Los únicos que pueden hacer una fiesta tan ridícula como el día de la marmota y petarlo son los americanos. ¿Que por qué? pues por la misma razón que hacen una mierda de hamburguesa de McDonalds y se convierte en delicatessen mundial, por lo mismo que tienen a negros que cuelan una pelota de basket a 20 metros moviendo un sólo dedo o hacen que el final de Lost sea lo más visto del mundo. Nosotros intentamos imitarlo y nos sale un final como el de Resines en los Serrano. 

La fiestas regionales y sus trajes regionales. ¿Qué depravado fetichista inventó los trajes regionales??. El moño apretao, pendientes que te arrancan las orejas, pololos… Trajes donde una tipa se pone faja o dos ensaimadas en la cabeza. El único que favorece es el de gitana y como peses más de 60 kilos pareces una morcilla. De nuevo los americanos dando una lección, ¿de qué se disfrazan ellos? pues de cowboys, y eso mola. ¿A quién te tirarías una noche a un tipo vestido de baturro o a John Wayne??.


Dejarse de festejar la vergüenza señores, mentando a un sabio amigo, si quieren una buena fiesta… pues tiren de ésta.

lunes, 13 de abril de 2015

EL PARTIDO CHONISTA

Las chonis tienen mala prensa, injusta, así es, son como las hamburguesas del Mcdonald,s.  Pero que levante la mano el que no ha probado ambas y le ha sabido la gloria.

Pues eso, que aunque no lo creáis, todas llevamos una choni dentro y si no la llevais, deberíais, porque las chonis son el nuevo remedio contra el hambre mundial, no salen caras, sí, tienen más aderezos y conservantes que el resto, pero alimentan más que un potito, están más prietas, y sobre todo follan mucho más y ¿por qué?? Ahí van mis razones:

- Son las que están más buenas. Primero porque para llevar toda la licra del universo pegada al cuerpo, tienes que estar prieta.

- Son las más sanas. Porque su target son los forzudos de tatus en la rabadilla, pendientes y chaquetilla de chándal XS con un brazo como una boa constrictor. ¿Y dónde están esos mendas?? pues en los gimnasios, así que para ligar a la luz del día con estos especímenes tienen que apuntarse a spining, body pump y body combact y eso… eso te pone más prieta que los tornillos de un submarino.



- Son las más estilizadas. Porque el tacón es imprescindible, el tacón estiliza. Y además pone un montón a los tíos, así que por ende, follan más.

- ¿Y por qué follan más?? pues porque por mucho que se lleven las modernas, haced una encuesta entre los tíos… ¿qué prefieren?  Una tipa con la camisa abrochada como un mormón y zapato vintage de abuela o un taconazo, un escote apretado donde no entra ni un boli Bic y un leggin de leopardo marcando “pezuña de camello”? (sí, lo de la pezuña de camello es slang choni y no me digáis que no mola). Sobran las respuestas. Tengo una teoría de la conspiración que apoyaréis y es que creo que la moda hipster femenina se la inventaron Rouco Varela y Pitita Ridurejo en una quedada del mercadillo Nuevo Futuro para captar acólitas entre las jovenzulelas malasañeras. Pero vamos, que sólo es mi teoría.

- Son más concienciadas que el resto. Porque ellas son de escai a muerte, de plástico por excelencia. Sus enjutos cuerpos no rozan piel de animal verdadera ni por asosmo. Con ellas el Amazonas y la fauna global vive en armonía para siempre.

- Son más felices. Porque hablan fuerte y dicen tacos. Y eso de todalavidadeDios descarga tensiones. Si estás todo el día sonriendo, siendo educada y lamiendo culos llegas a tu casa que te quieres cargar a alguien. Ellas se cagan en quien haga falta y se quedan como Dios y llegan tan relajadas a casa que le echan 3 kikis al Yonatan.

- Salen más baratas. Invitarlas a cenar es más barato que una chacha en Sudamérica, son muy de kebak con kalimotxo, todo con K, más que de punto MX y aquí el cambio de inciales viene a ser una diferencia de 200 pavos. Un lujo para cualquier maromo, que el resto se lo puede gastar en condones.



- Son muy bailongas. Y como bailan tanto, queman muchas más calorías que el resto, porque no quemas lo mismo cuando haces un twerking de un temaco de DJ Peligro que cuando bailas a Vetusta Morla, que no se te mueve el flequillo… ni el alma…

- Y de nuevo vuelven a follar más, porque el reguetón arrima y alegra cebolleta, con Vetusta Morla no te rozan por fuera ni la teta.

- Llevan el pelo más sano porque tienen amigas peluqueras que les peinan gratis y les echan las mejores mascarillas.

- Van pintadas como una puerta, sí, pero ¿de verdad se liga más  con la cara lavada?? JA, JA y JA, quiero conocer al tío amante de la ojera de mapache mañanera, del color blanco roto de la tez resacosa y los ojos pequeños como dos puñaladas a un tomate. Enga hombre!! He comentado que follan más?? Pues eso…

- Y por último… tienen unas mandíbulas mucho más sanas y desarrolladas que el resto porque mascan mucho chicle… y eso es bueno… muy bueno… y lo sabes ;)

Ahora que estamos en precampaña electoral, yo voto por ellas!! Que les den a los capitalistas y a los chavistas, hay que hacerse CHONISTA!!. Lo sabéis, las chonis, son gente Dura de pelar, Dura de pelar. Y os lo dice Rebeca.